o21. Entonces, ¿cuál es el panorama actual?

S. J.: Digamos que por un lado existe un nivel de oficinas, que quizás hace doce o quince años tenía sus inicios de desarrollo como edificios inteligentes, pero con el “boom” inmobiliario, donde todo valía, no hacía falta ese plus: ese valor añadido de aportar muchas nuevas tecnologías al edificio. Todo se alquilaba, todo se vendía. Así es que se cayó un poco en el olvido todo el esfuerzo se instalaciones tecnológicas y avances, los más vanguardistas…

Pero en este último tiempo, sobre todo en el último año, hemos visto un interés cada vez mayor por retomar ese valor añadido del edificio. ¿Razones?, hoy existe una lucha para alquilar los espacios y las oficinas deben de estar cada vez más preparadas. Las empresas no podemos tirar adelante con las estructuras actuales: ahora hay que ahorrar energía, mejorar las comunicaciones, además de que todo el mundo está informatizado, no sólo con sus ordenadores, sino que con su IPad, sus móviles…

La mezcla de tecnologías empieza a ser cada vez más compleja, los temas de seguridad también. Pero no sólo de intrusión, de terciarios, pero también de seguridad informática.

Por otro lado, también se ha visto la necesidad de que realmente sean más flexibles y adaptables las mismas oficinas, a nivel tecnológico también: no vale ya hacer esas instalaciones, calcular para que tengamos 32 o 64 o 350 puestos, porque un buen día podemos ver que ya no hay 350, sino 120

¿Por qué? Porque ese departamento se ha movido o lo han marginado, entonces toda flexibilidad que se debería de apoyar evidentemente con diseño arquitectónico, pero también tenemos mucho mayor flexibilidad tecnológica de lo que hay actualmente. 

o21. ¿Diría que estamos ante un sector poco cohesionado?

S. J.: Creo que en España existe un problema en el proceso de diseño de edificación y de arquitectura; tanto en la nueva construcción como rehabilitación. Está muy segmentado el proceso de construcción… ¿Qué sucede entonces?. Que si el cliente quiere una oficina nueva o el edificio, arquitecto e ingeniero hablan, las comunicación se inicia; el promotor se hace la idea, se encarga el proyecto y el arquitecto deja el proyecto en manos de los ingenieros, del constructor, la instalación, la puesta en marcha para, al final, llegar a un propietario, que puede ser el facility manager, el que  tiene que operar ese edificio, que lo enfocará a su manera. Es entonces cuando empiezan las consideraciones: habría sido mejor si se hubiera puesto esto o eso otro…

o21. ¿Qué postura sectorial y qué conclusiones espera que salgan de este evento?

S. J.: La idea es unir a todos los actores que participan en este proceso, hacer que transmitan sus planteamientos, que intercambien sus puntos de vista. De modo que lo que hemos hecho es unir, involucrar a los principales organismos y factores que forman parte de este proceso; los que participan en el ciclo de vida del edificio y unirles para crear un congreso, una plataforma de intercambio de información, de conocimiento, de networking…

Un foro de las últimas novedades, de las tendencias, proyectos de la distintas categorías y qué es lo que han hecho… que se vayan clarificando y perfilando las tendencias. Esto se valora mejor si tenemos en cuenta que hoy en día buena parte de ellos no tienen ningún contacto. Digamos que al final no es un problema un tanto tecnológico en sí mismo, ya que tecnología hay de sobra, creo que es mucho más un proceso de integración, de proceso de proyectos, de normativas, de modelo de negocios, etc.

o21. ¿Y tal vez de parcelas de poder?

S. J.: Efectivamente. Una de las mesas redondas que tenemos en el programa debatirá justamente sobre eso. Existe muy poca o nada de transversalidad y abundan las posturas tipo: “el que sabe de esto soy yo”. De modo que el arquitecto a lo suyo, el ingeniero a lo suyo…el intrusismo pero desde fuera, no se plantean de que ellos son intrusos hacia fuera.

Por ello, en la primera mesa redonda que modera AEDIT, La Asociación de Proyect Managers, es una mesa de los decanos del colegio de arquitectos, ingenieros industriales, de telecomunicaciones, administradores de fincas y el debate se centra en ”Qué deberían de aportar los diferentes profesionales en profesión y gestión, en los edificios inteligentes”. Claro, cada uno piensa que debería de hacer prácticamente de todo, pero no es así. Por eso habrá un debate muy interesante…

Más información en www.congreso-edificiosinteligentes.es/