o21. Que el entorno de trabajo sea un sitio atractivo

I. L. E.: Para que la gente venga a comunicar, a desarrollar y que aporte valor a su trabajo. No olvidemos que para trabajar en ese equipo, en esa red de colaboración, a menudo hace falta incorporar un poco de roce e intercambio. Como iremos trabajando cada vez más virtualmente, ese roce se irá perdiendo con el tiempo. Las nuevas generaciones lo están perdiendo, trabajan duro, pero están metidos en las redes sociales mucho tiempo, y esa es su plataforma natural de interacción. Hay que tratar que sea también un entorno que ofrezca realmente elementos de valor añadido que no te brindan otros sectores.

o21. ¿Pero concretando, cuáles serán las funciones de la oficina en este siglo XXI?

I. L. E.: Un sitio donde habrá muchos más elementos de interacción, donde poder hacer un “brainstorming”, habrá más elementos que faciliten una reunión, como espacios, entornos, dedicados a servicios de valor añadido para personas, donde puedas colaborar de cualquier manera. Eso es lo que al final será la oficina. En la mayoría de ellas, ese enorme erial de mesas y sillas individuales para trabajar, será un recuerdo. Como trabajaremos de otra manera, necesitaremos otras dimensiones distintas a las que estábamos acostumbrados. Esto lo irá ordenando nuestro mundo del trabajo y consecuencia de él, será lo que quede para nuestras oficinas. Pero no debería de ser al revés. Nuestras oficinas no deberían condicionar nuestra manera de trabajar, sino que esta debería de condicionar lo que queda para las oficinas.

o21. Volvamos a la actualidad. ¿Su opinión sobre el enorme parque actual de oficinas desocupadas?

I. L. E.: No me aventuro a pronosticar cómo acabará la historia. Lo que sí es cierto es que las oficinas, dada la nueva conformación de los puestos de trabajo, necesitarán cada vez menos metros cuadrados. A medida que vaya aumentando nuestra movilidad iremos dejando más puestos libres en la oficina o iremos reduciendo los puestos para que haya menos puestos para más gente. Irá subiendo un ratio de no territorialidad.

Este tema pone de relieve una preocupante tendencia agravada con la multiplicación de las aplicaciones tecnológicas al mundo laboral. En las grandes urbes, los atascos son imparables. Si somos sinceros, resulta muy difícil comprender por qué tantos miles y miles de personas pierden tiempo en atascos de una hora o así todas las mañanas, cuando existen tantas posibilidades para trabajar de una manera distinta. Pienso que es una tendencia que puede cambiar. Que por las mañanas te puedas conectar desde tu casa y trabajar dos horas, para luego marcharte a trabajar en coche, o en metro, y un día vas y otro no… Lo increíble es que esta flexibilidad la tenemos de todas maneras, es como si todos llevásemos un teléfono móvil, pero nos dejasen utilizarlo sólo cuando estuviésemos en la oficina. Entonces para qué lo tengo…Tecnología hay, lo que tenemos que hacer es utilizarla… esa es la historia.

o21. Así podrán determinarse el espacio y los puestos de trabajo que se precisan en una oficina

I. L. E.: Es innegable que bajará la cantidad de puestos de trabajo que se demandarán en la oficina. Por otro lado, aumentarán esos espacios de comunicación, interacción, intercambio, espacios de valor añadido, etc. ¿Ganamos o perdemos? Seguramente habrá oficinas que al final demandarán más metros que antes y otras que exigirán muchísimo menos ¿no?. En otras palabras, los espacios de interacción y demás, están subiendo en importancia y en cantidad de metros cuadrados, pero también es verdad que la mayor masa de los puestos de trabajo está bajando. Eso es lo que vamos a ir encontrando.

Hay muchas tendencias que de alguna forma respaldan esto y en la oficina no lo toman muy en cuenta. Es que las fronteras muchas veces van a ser más permeables, vamos a crear estructuras más en red. Como se está trabajando ahora en software libre por ejemplo, y en muchas otras disciplinas, pues también en el entorno de trabajo empezará a tener recursos compartidos con otras organizaciones. Entonces aprenderemos cada vez más a tener sinergias transversales en distintas líneas.

o21. ¿Algún ejemplo en particular?

I. L. E.: Los clusters. Un cluster no sólo cumple los requisitos de conformarse alrededor de un tema o de un conocimiento determinado, de una industria, de lo que sea… hay intercambio de conocimiento, hay fronteras más fluidas de lo que hace un proveedor y lo que hace un cliente, las fronteras se difuminan más, no son ya tan rígidas como antes sin olvidar que un cluster básicamente crea sinergias. Simplificando, si todos quieren lograr un objetivo, todos pagan un trozo de la tarta y todos pueden usar la tarta entera. 

o21. Finalmente ¿cuando comenzarán los empresarios a asumir todas las posibilidades que tienen muchas tecnologías de oficina que se utilizan muy deficientemente?

I. L. E.: Aunque hay algunas que están todavía muy en clave, siguen siendo muy tradicionales, son muy lentas y muy difíciles de cambiar, mientras que otras son realmente rapidísimas y muy innovadoras… muy a la última. Aunque muchos se darán cuenta cuando tengan un problema de competitividad muy serio, otros lo harán cuando ya sea demasiado tarde. Habrá de todo. Otros se darán cuenta a tiempo y podrán ser un poco menos reactivos, incluso conseguirán ser proactivos en algún momento. En fin, yo creo que en el mundo empresarial tienes desde los que están muy, muy avanzados, hasta los que están muy, muy atrasados. Habrá de todo. Pero las fuerzas del mercado nos irán moviendo rápidamente, por industrias, por sistemas, por países…